El municipio de Caldas es mi lugar de origen y la cuna del río Medellín. Sus aguas nacen en el alto de San Miguel, entre ellas nadé, sentí texturas, me envolvió entre sus colores, sus nieblas y escuché los cantos de las aves.
Mi trabajo usa un material que es el hogar de las abejas, las grandes responsables de la vida: la CERA. Al ser fuente de vida, es un material sagrado, con un aroma inconfundible que permanece impregnado en el tiempo.
Mis piezas son talladas sobre cera de abeja, y rinden homenaje a las especies endógenas del alto de San Miguel.
Mónica Londoño Soto
-2015-